Texas retira su financiación a Planned Parenthood

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El gobernador de Texas, Gregory Abbott, ha anunciado que se cortará el financiamiento de Medicaid a los centros de Planned Parenthood en el estado americano. Se trata del seguro médico para personas de bajos ingresos. Cada estado cuenta con un programa Medicaid que proporciona cobertura médica para personas con bajos ingresos, familias y niños, ancianos y personas con discapacidad. El Inspector General de la Comisión de Servicios Humanos y de salud de Texas, Stuart Bowen, envió una carta a la entidad abortista situada en la Costa del Golfo en la que explicaba que el estado de Texas dejaría de financiar a la multinacional. En dicho mensaje, el Inspector increpaba a Planned Parenthood  que «ya no son capaces de realizar servicios médicos en una forma profesionalmente competente, segura, legal y ética”. Además, señaló que entre las razones para terminar con el financiamiento a la entidad abortista, se encontraba “la extensa evidencia en video filmada en su instalación (Costa del Golfo) y otras afiliadas de Planned Parenthood en todo el país”, en las cuales se reconocen faltas como “alterar el tiempo o método de aborto” para “obtener tejido fetal”. “La espantosa recolección de partes de cuerpos de bebés de Planned Parenthood no será permitida en Texas, y las prácticas brutales deben llegar a su fin”, declaró. El gobernador de este estado, ha transmitido que “finalizar la participación de los afiliados de Planned Parenthood en Medicaid en el estado de Texas es otro paso para proveer mayor acceso a atención de salud segura para mujeres, al mismo tiempo que protegemos a nuestros más vulnerables, los no nacidos”. A partir de los diez vídeos difundidos que revelaban el tráfico de órganos de bebés abortados por parte de la filial abortista, varios estados de América, como es el ejemplo de Texas, han comenzado a reaccionar. Con esta medida, Texas se convierte en el sexto estado en retirar fondos públicos a Planned Parenthood, después de Arkansas, Alabama, New Hampshire, Utah y Louisiana Tras anunciar la nueva medida, Abbott ha asegurado que “Texas ha dado un paso adelante y ha mostrado su compromiso inquebrantable de proteger la vida y de proveer de servicios de salud a las mujeres”. La oficina del gobernador ha asegurado que la medida no afectará el acceso al cuidado de la salud de las mujeres porque “hay miles de proveedores de salud adicionales en Texas”, entre ellos centros de salud calificados federalmente, clínicas de salud rurales certificadas en Medicaid, y otros proveedores de servicios de salud en el estado que participan en el programa de Salud de la Mujer de Texas y en Medicaid. La consejera legal de la organización estadounidense Alliance Defending Freedom, Kellie Fiedorekelogió, ha defendido que la decisión del gobierno del estado de Texas, y ha indicado que con esta medida “se ha asegurado de que las organizaciones con un historial de abuso y potencial fraude no reciban más su dinero”. Recordamos que Planned Parenthood recibe del gobierno federal Estados Unidos más de 500 millones de dólares al año, que proceden de los impuestos de los contribuyentes.

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