Un grupo de islamistas asesina a cuatro monjas de la orden fundada por la Beata Teresa de Calcuta. El Papa, conmocionado, pide diálogo.
Cuatro religiosas de las Misioneras de la Caridad, la Congregación fundada por la Beata Madre Teresa de Calcuta, fueron masacradas este viernes junto a otras doce personas –varios de ellos ancianos-, por presuntos terroristas que ingresaron al convento de Aden (Yemen), donde funciona el albergue de ancianos que administran las monjas. La agencia vaticana Fides informó que además de las religiosas, también han sido asesinados el chofer y al menos otros dos colaboradores de la comunidad, mientras que la superiora del convento se libró de la muerte. De las monjas asesinadas dos eran de Ruanda, una de la India y otra de Kenia. Según las fuentes de seguridad de este país, ubicado al sur de Arabia Saudita, el ataque fue perpetrado por extremistas musulmanes que acusan a la congregación de hacer proselitismo cristiano. Este es el segundo ataque que sufren las misioneras de la caridad en este país de mayoría musulmana. La primera vez ocurrió en julio de 1998, cuando hombres armados atacaron su centro de cuidados para discapacitados en la ciudad de Al Hodeida, a orillas del mar Rojo, donde murieron dos enfermeras, una india y otra filipina. El Papa Francisco ha mostrado su conmoción y tristeza por el asesinato de Misioneras de la Caridad, –la Congregación fundada por la Beata Madre Teresa de Calcuta, junto a otras doce personas (varios de ellos ancianos), por presuntos terroristas que ingresaron al convento de Aden (Yemen), donde está situado el albergue de ancianos que administran las monjas. En un mensaje del Pontífice enviado a través del Secretario de Estado del Vaticano, el Cardenal Pietro Parolin, se indica que “Su Santidad Francisco está conmocionado y profundamente entristecido”. “Él asegura sus oraciones por los muertos y su cercanía espiritual a sus familias y para todos los afectados de este acto de violencia sin sentido y diabólico”. El Papa “Ora para que esta masacre sin sentido despierte las conciencias, de lugar a un cambio de corazón, e inspirar a todas las partes a deponer las armas y tomar el camino del diálogo”.
